: La muchacha dorada se banaba en el aguay el agua se doraba. Las algas y las ramas en sombra le asombraban, y el ruisenor cantaba por la muchacha blanca
La muchacha dorada se banaba en el aguay el agua se doraba. Las algas y las ramas en sombra le asombraban, y el ruisenor cantaba por la muchacha blanca